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Foto: ABC Noticias

Ante el aumento de la inseguridad y el secuestro de una familia en su comunidad, un grupo de 20 niños indígenas de entre 11 y 15 años se integró a la policía comunitaria de Ayahualtempa, municipio de José Joaquín Herrera, en el estado de Guerrero.

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Los menores recibieron armas de fuego y carrizos para proteger a sus familias y a su territorio de los ataques del grupo delictivo Los Ardillos.

La ceremonia de protesta se realizó el pasado miércoles 24 de enero, en la cancha deportiva del poblado, donde los niños mostraron sus habilidades con las armas y realizaron ejercicios de entrenamiento.

Algunos de ellos se sumarán a la búsqueda de cuatro integrantes de una familia que fue secuestrada el pasado 19 de enero, mientras que otros harán labores de vigilancia en la zona.

Los niños forman parte de la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitaria-Pueblos Fundadores (CRAC-PF), una organización que agrupa a comunidades indígenas de la región centro y montaña de Guerrero, que se rigen por sus propios sistemas de seguridad y justicia.

La CRAC-PF denunció que el gobierno federal y estatal ha sido omiso ante la violencia que sufren los pueblos originarios y exigió la liberación de la familia secuestrada.

La decisión de integrar a los menores a la CRAC-PF fue tomada por la asamblea comunitaria, ante el resurgimiento de la violencia que ha dejado decenas de muertos, desplazados y desaparecidos en los últimos años.

Los habitantes de Ayahualtempa acusan al grupo criminal Los Ardillos de ser los responsables de estos hechos, así como de amenazar, extorsionar y despojar de sus tierras a los campesinos.

La situación de los niños armados ha generado preocupación y rechazo por parte de organizaciones de derechos humanos, que han señalado que se trata de una violación a los derechos de la infancia y que los expone a riesgos graves para su integridad física y psicológica.

Asimismo, han exigido al Estado mexicano que garantice la seguridad y el bienestar de los niños y niñas de Guerrero, así como el respeto a sus derechos culturales y colectivos.

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